Después de trabajar durante una sesión con la lámina de referencia proporcional se observa:
Que una mayoría obtienen resultados satisfactorios, es decir que consiguen un parecido razonable.
Ahora bien, este parecido se obtiene mayormente gracias características variables y cambiantes como suelen ser el pelo y sus característicos peinados y otros complementos externos como pueden ser gafas, aparatos dentales...
Considero, de manera intuitiva, a día de hoy, que este dato supondrá un ítem importante al que volveré. Actualmente no sé como justificarlo y encajarlo.
El resto de los alumnos y alumnas que no han conseguido parecidos razonables, manifiestan diferentes condiciones. Desde el que carece de habilidades plásticas para plasmar el análisis que pudiese plantear, hasta el que la actividad no le motiva lo suficiente y por determinados condicionantes no realiza un análisis del que se pudieran obtener los suficiente datos.
Analizando de una manera muy general y teniendo en cuenta mis consideraciones personales del día a día. Concibo que el alumnado al partir de una base que ellos interpretan como correcta les facilita el análisis en mayor medida.
La lámina supone una base, la cual modifican los alumnos y alumnas. Su análisis es comparativo en relación a ésta. Contrastan la información y modifican los caracteres propuestos en la lámina matriz.De esta manera el análisis se facilita, puesto que tiene referentes directos.
Respecto al primer ejercicio, libre, de creación, se puede observar, además de las deformaciones expresivas involuntarias (de las cuales se habla en clase),que cambia la actitud y la manera de afrontar el ejercicio.
El derrotismo caracteriza este primer enfoque, puede que demasiado libre para estos. Mientras que esta sensación mengua en el segundo planteamiento, en el momento que identifican un referente que puedan considerar correcto.
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